La música instrumental en el barroco experimenta un gran desarrollo y una gran riqueza de formas y géneros. Dentro de ellos destacan los denominados Conciertos. El término concierto procede del latín concertare (luchar), o de su evolución en italiano (reunir). Se desarrollan dos tipos:
Concerto grosso:
en el que se alternan y reunen dos grupos instrumentales.
- concertino (conjunto pequeño) un grupo de solistas, a menudo dos violines y un violoncelo, pero pueden ser otros y mayor número.
- ripieno (conjunto relleno), concerto grosso (conjunto grande), o tutti (todos) de estas maneras se conoce la orquesta generalmente de cuerdas que alterna o completa las partes del concertino.
Extructura externa e interna tipo del concerto grosso.
Solía estructurarse externamente en varios movimientos, a menudo cuatro o cinco y alguno de ellos solía estar escrito al estilo de una fuga. Aunque la estructura interna es más variada y libre que en el concierto solista otras formas internas utilizads son la binaria y la ternaria.
En el video se puede apreciar el concertino en primer término (dos violines y un violoncelo) a los laterales los intrumentos polifónicos del contínuo y en la parte del fondo el ripieno (orquesta de cuerdas)
Concerto solista:
en el que un instrumento solista (o varios) se alterna con la orquesta (tutti), aumentando así la importancia del contraste.
Extructura externa e interna tipo del concerto solista.
El Concierto solista está estructurado externamente habitualmente en tres movimientos (rápido-lento-rápido). Presenta una estructura externa derivada de la obertura italiana.
Los movimientos rápidos presentan suelen tener la forma interna conocida como rítornello (pequeño retorno). Esta consiste en un tema principal que reaparece en su totalidad o abreviado a lo largo del movimiento. En la primera y última repetición está en la tonalidad original. Las reapariciones del ritornello están separadas por episodios solistas